¿Qué es la libélula?
La libélula es una especie de insecto de orden. Odonataque reúne alrededor de 6.000 especies, que se caracterizan por su vientre alargado, cabeza ancha y cuatro alas.
La palabra libélula proviene del latín libélulaque a su vez es el diminutivo de libélula que significa «equilibrio», un término que se refiere a la capacidad del insecto para permanecer equilibrado en el aire.
El término libélula existe desde la antigüedad, pero no fue hasta el siglo XVII cuando el naturalista sueco Carlos Linnaeus introdujo la palabra en su obra. sistema natural.
Véase también taxonomía
Anatomía de la libélula
Dentro de los ojos de las libélulas hay estructuras llamadas omatidios que actúan como ojos independientes.
Las libélulas se caracterizan por tener un cuerpo y alas largas y delgadas, lo que les otorga la aerodinámica necesaria para volar a altas velocidades. Además, las libélulas tienen la capacidad de batir sus cuatro alas simultáneamente, lo que les ayuda a usar su energía de manera más eficiente.
Sus alas no solo son súper resistentes, sino que también les permiten volar en cualquier dirección (arriba, abajo, adelante, atrás, derecha, izquierda). Esto, unido a su velocidad, les otorga autonomía y una capacidad de defensa de los depredadores mucho mayor que otras especies de insectos.
Sus patas están agrupadas de tal manera que encierra a su presa en una especie de bolsa, evitando que escape y facilitando el transporte del insecto.
Quizás una de sus características más destacadas tenga que ver con su sistema ocular, ya que tienen alrededor de 30.000 estructuras en sus ojos compuestos llamadas omatidios. Estas estructuras actúan como el propio ojo, lo que lo convierte en un sistema de visión muy completo, lo que permite a la libélula capturar todo el movimiento dentro de un rango de 360 grados.
reproducción de libélula
Dos libélulas en el proceso reproductivo.
La libélula macho corteja a la hembra realizando un vuelo específico para llamar su atención. Cuando la hembra se acerca, el macho la «engancha» a su abdomen, y los órganos sexuales de ambos se juntan para iniciar la fecundación.
Las hembras ponen sus huevos cerca del agua y, una vez que eclosionan, comienza el ciclo de vida de las nuevas libélulas.
Ciclo de vida de la libélula
La fase adulta de la libélula es la más corta y dura un máximo de seis meses.
Una libélula puede vivir entre seis meses y siete años. Después de que los huevos eclosionan, pasa la mayor parte de su vida como ninfa bajo el agua, alimentándose de pequeños peces e invertebrados.
En esta etapa, puede vivir alrededor de los cinco años cuando la libélula está lista para convertirse en un insecto adulto a través del proceso de metamorfosis. En ese momento sube a la superficie, comienza a absorber oxígeno directamente del aire, se desprende de su piel de larva y despliega sus alas para comenzar la fase final de su ciclo de vida, que durará unos seis meses.
Debido a que la mayor parte del ciclo de vida ocurre bajo el agua, sus hábitats naturales suelen ser estanques, lagos, pantanos y ríos.
Ver también metamorfosis
Significado esotérico de la libélula
Las libélulas son un símbolo de prosperidad y buena suerte en muchas culturas.
Desde la antigüedad, la libélula ha sido considerada la portadora de la suerte, el poder y el equilibrio, este último debido a su capacidad de volar en todas las direcciones.
En las crónicas de Japón del año 720 d. C cuenta la historia de cómo el Emperador Yuryako Tenno fue picado por un tábano, que a su vez fue atacado por una libélula, por lo que el Emperador estaba tan agradecido por la repelencia del insecto que bautizó a su país Aritsu Shima, o Isla de la Libélula, la antigua nombre de Japón.
Debido a este episodio, las libélulas se consideraban animales afortunados, razón por la cual estaban presentes en los cascos de los samuráis, los uniformes de los soldados y los artículos familiares que se consideraban importantes.
En la cultura nativa americana, la libélula es la manifestación de las almas de los difuntos; También son considerados mensajeros de prosperidad.
Por su parte, en la cultura maya, se creía que las libélulas ayudaban al sol a salvar los fragmentos de la luna después de que esta se rompiera, producto de un rayo.
En el área de Feng Shuila presencia de una libélula en la casa o el jardín presagia buena suerte, sobre todo en el ámbito laboral o empresarial, por lo que los profesionales en este campo recomiendan tener un cuadro o colgante en forma de libélula en el lugar de trabajo, hogar, zona de estudio y recibidor .
Asimismo, soñar con libélulas representa cambio y transformación con buena suerte. Si una persona aparece en un sueño comiendo una libélula, esto puede indicar que está experimentando una pasión que puede herir u ofender los sentimientos de los demás.
Además, en algunos países se mantiene la creencia de que una libélula alrededor de la cabeza de un individuo lo volverá loco o será castigado. En otros se dice que…